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CONSTRUYAMOS UNA COMUNIDAD DE DESTINO DE LA HUMANIDAD
desarrollo económico de los países y los desplazamientos de la gente de
la región.
Tercero, hacer más expedito el comercio. La población a lo largo de
la Franja Económica de la Ruta de la Seda totaliza cerca de 3.000 millones
de habitantes, y la magnitud y el potencial de sus mercados no conocen
parangón. Los países poseen un enorme potencial de cooperación en los
terrenos del comercio y la inversión. Deben explorar vías facilitadoras
del comercio y la inversión y efectuar adecuados arreglos al respecto,
con el propósito de eliminar barreras comerciales, reducir costes del
comercio y la inversión y elevar la velocidad y la calidad de la circulación
de la economía regional, en favor de materializar el beneficio mutuo y de
ganancia para todos.
Cuarto, intensificar la circulación monetaria. China, Rusia y otros
países han llevado a efecto una buena cooperación en la liquidación
de las transacciones comerciales en monedas nacionales, y de ello
han obtenido logros alentadores y acumulado ricas experiencias. Es
necesario generalizar esta buena práctica. Si los países consiguen realizar
la convertibilidad y la liquidación de las monedas nacionales en cuentas
corrientes y cuentas de capital, reducirán en gran medida los costes de
la circulación y aumentarán su capacidad de hacer frente a los riesgos
financieros, y se elevará así la competitividad de la economía de la región
en el plano internacional.
Y quinto, fortalecer la unión de voluntades de los pueblos. La
amistad entre los pueblos es la llave de unas buenas relaciones entre los
Estados. Para llevar al éxito la cooperación en los terrenos antedichos,
hay que contar con el apoyo de los pueblos, intensificar los intercambios
amistosos entre ellos y acrecentar su comprensión mutua y amistad
tradicional, con miras a sentar sólidas bases de apoyo público y social en
pro del desarrollo de la cooperación regional.
Notas
1 Zhang Qian (?-114 a. n. e.), ministro de la dinastía Han del Oeste. Viajó dos veces
(138 y 119 a. n. e.) a las Regiones Occidentales (al oeste de los pasos de Yumen y Yangguan)
por orden del emperador para concertar alianzas con los grupos étnicos locales de allí en
resistencia a los hunos, llegando hasta Asia Central. Sus viajes sirvieron para estrechar las
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